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Los negros "rescatan" a Obama
Los negros "rescatan" a Obama 06OCT 2010 19:51 Pese a la dura travesía de estos dos años, la América de color sigue teniendo una fe ciega en Barack Obama. El apoyo al presidente entre la comunidad negra apenas se ha deteriorado desde su llegada a la Casa Blanca y se mantiene en un increíble 91%, según el último sondeo de Gallup. La popularidad total de Obama sigue entre tanto bajo la línea de flotación, en un discretísimo 45%, gracias sobre todo al rechazo frontal que provoca en la América conservadora y blanca, la misma que cree que el presidente nació en Africa y se parte el espinazo rezando en dirección a la Meca. “Uno de cada cinco americanos piensa que Obama es un cactus”, proclamaba recientemente en titulares el semanario satírico The Onion, mofándose de la campaña de difamación contra Obama. “La América blanca ha perdido la cabeza”, titulaba muy seriamente en su penúltimo número el Village Voice, denunciando la histeria propagada por las huestes el Tea Party. “¿Es racista el apoyo a Obama por parte de los negros?”, se pregunta por su parte el comentarista afroamericano (y conservador) Jerome Hudson. “A menos que pensemos que los negros son tan radicales como él, ¿cómo podemos explicar el hecho que el 91% los afroamericanos le apoyen a estas alturas?”. El apabullante respaldo a Obama entre los negros es incluso superior al de los demócratas (79%) y los progresistas (75%). Las caídas más preocupantes de su popularidad se han producido mientras entre los jóvenes (57%), los hispanos (55%) y los votantes independientes (40%). El presidente se aferra pues al “salvavidas” afroamericano, que ha vuelto a poner sobre la mesa la espinosa cuestión racial, abordada por el director del “New Yorker” David Remnick en el libro que estos días se publica en España: “El Puente: vida y ascenso de Barack Obama”. “Nadie debería haber tenido la ilusión de que, en virtud de mi elección, se iban a acabar de pronto los problemas raciales”, confiesa el presidente en el epílogo. “Desde luego, yo no la tuve, y fui muy explícito al respecto durante mi campaña”. “Estados Unidos evoluciona, y a veces estas evoluciones son dolorosas”, afirma el presidente, que advierte sobre cómo el progreso nunca es lineal y cómo el proceso de “tolerancia y comprensión” abierto con su propia elección se va a enfrentar inevitablemente a serios reveses. “Habrá personas que no quieran fomentar esa comprensión porque tienen miedo al futuro. No les gusta esta evolución (...) Yo tiendo a ser bastante comprensivo con la angustia que la gente siente ante los cambios, porque creo que si eres humano, reconoces eso en ti mismo
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